Ciclo de Charlas CRHIAM: ¿Cómo avanzar hacia una minería más sostenible?
La minería es un pilar esencial de la economía chilena, con megaproyectos enfocados en la extracción de cobre y otros minerales. No obstante, el desarrollo de estas operaciones a gran escala plantea desafíos significativos en los ámbitos ambiental, social y económico. En este contexto, la investigación y la innovación juegan un papel crucial en la búsqueda de soluciones sustentables que reduzcan el impacto ambiental y promuevan prácticas responsables.
En este marco se llevó a cabo el Ciclo de Charlas de CRHIAM en octubre, titulado «Investigación e Innovación para la sustentabilidad de megaproyectos mineros», liderado por Rodrigo Ruiz, Manager R&D Projects, Mineral Processing; e integrante del Consejo Asesor Nacional de CRHIAM. Durante su presentación, Ruiz destacó los esfuerzos de la minería nacional por avanzar hacia una industria más sustentable, centrándose en áreas clave como el uso eficiente del agua, la investigación, la integración de tecnologías como la inteligencia artificial y el monitoreo remoto, además de la adopción de energías renovables.
Asimismo, subrayó la importancia de la colaboración entre el gobierno, las empresas mineras, las universidades y los centros de investigación para lograr una minería más sustentable, que respete tanto el medio ambiente como a las comunidades locales.
«La mayoría de los proyectos mineros se concentran en las regiones del norte del país, lo que nos da la oportunidad de dirigir buenas ideas e investigaciones hacia esas zonas. Sin embargo, esto no es posible sin la integración. Universidades, centros de investigación y grupos de desarrollo buscan conectarse con la industria, pero no ha sido un camino sencillo», explicó Ruiz.
El futuro de la minería en Chile enfrenta múltiples desafíos, como la complejidad y los altos costos asociados al desarrollo de tecnología minera a largo plazo, la necesidad de aumentar la productividad, las fluctuaciones en los precios de las materias primas y la exigencia de garantizar la sostenibilidad del sector. Este escenario demanda estrategias dinámicas que se ajusten a las necesidades actuales.
«En los últimos dos años, la conexión con la investigación se ha centrado en desafíos clave, como reducir el consumo de recursos, optimizar el ciclo del agua, mejorar la seguridad, minimizar la exposición a agentes nocivos, controlar el polvo y medir eficientemente las variables del proceso. Nuestro objetivo es lograr que todo el sistema sea más eficiente y sostenible», concluyó Ruiz.